unwritten

"Live your life with arms wide open, today is where your book begins, the rest is still unwritten". Natasha Bedingfield

viernes, 19 de agosto de 2011

Derrumbando muros...

Con la "celebración" del 50 aniversario del alzamiento del muro de Berlín la semana pasada, empecé a pensar en la costumbre tan arraigada en el ser humano de poner límites a todo. No sólo me refiero a las fronteras geográficas, a esas líneas invisibles que hacen que sin conocernos de nada podamos llegar a ser enemigos, si no a los muros que nos ponemos a nivel personal. 
Nos ponemos enormes murallas en nuestras relaciones. Recuerdo unas palabras que me dijo una de mis mejores amigas: "Te has creado un muro tan grande que nadie es capaz de saltar al otro lado", y es cierto. 
Murallas laborales. Nos marcamos unos límites en el trabajo pensando que no vamos a poder ir más allá de nuestras propias limitaciones, cuando no es así.
Hasta ponemos límites a nuestro sueños por creerlos inalcanzables. Hasta eso que sólo reside en nuestra cabeza tiene que presentar batalla contra nuestra particular muralla.
¿De verdad necesitamos murallas? ¿De verdad necesitamos unas estúpidas fronteras que nos separen? ¿Por qué no nos lanzamos libremente a la experiencia de vivir?


"Dios no ha creado fronteras. Mi objetivo es la amistad con el mundo entero."
Gandhi

2 comentarios:

  1. Para mí es el miedo el que pone esas fronteras, que a veces parecen insalvables. Uno puede no tener la intención de construir sus murallas pero termina haciéndolo.

    ¡Necesitamos valorrrrr! ¡Atrevernos a saltar o a atravesar esos muros!

    Ahhh... Yo también tengo algunos que me gustaría demoler. Me apunto al carro de los que estén dispuestos a aumentar su valentía. :)

    Besos de domingo nublado!

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  2. Sí, el miedo impide avanzar en muchos aspectos de la vida.
    Yo como tú, me apunto a ser valiente, a derribar cada una de las murallas que aparezcan en mi camino.

    Besos de domingo lluvioso por aquí arriba :)

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